Del Huerto al Puerto es un proyecto de economía circular que genera un fertilizante a partir de residuos de pescado. Durante el eviscerado y fileteo el pescador tira al mar o a las costas los desechos, perdiéndose cerca del 70% del producto; entre cola, espinas, escamas, piel, cabeza y vísceras. Estos residuos son transformados en fertilizante a través de un proceso físico y químico, y debido a que en la costa los suelos son pobres en micro y macronutrientes con este fertilizante se genera un enriquecimiento favoreciendo el desarrollo y crecimiento de hortalizas. Al momento se ha cultivado chile habanero, tomate, cebolla y chiltepín fertilizado a base de residuos de pescado. Del Huerto al Puerto aborda los ODS 2 y 14 al favorecer la producción de alimentos a partir de un fertilizante orgánico asequible en comunidades costeras lo que contribuye a la lucha contra la desnutrición en las localidades rurales y con alta marginación, y permite aprovechar por completo los recursos marinos.