Se quiere implementa un modelo de evaluación de los recursos hídricos complementaria a la actual. Partiendo por la evaluación integral ecológica del cuerpo de agua, en las variables biológicas (tomando como referencia macroinvertebrados como bioindicadores) e hidro morfológicas (evaluando el hábitat fluvial, las riberas y demás parámetros necesarios). A partir de estos resultados se generarán propuestas de acción para la restauración o recuperación de un cuerpo de agua. Estas acciones están dirigidas mayormente a la recuperación del espacio fluvial y la reforestación de dichos espacios con especies nativas propias de las riberas, puesto a que las riberas cumplen funciones ecológicas importantes en el ecosistema. Los impactos generados por las acciones realizadas ayudarán a paliar los efectos del cambio climático y mejorar la gestión de riesgos.