El Agave o Penco, la planta de las mil maravillas; aprovechada por los pueblos originarios desde hace miles de años en los valles de Quito; su cultivo no necesita de mayor cuidado y crece en lugares desérticos y suelos pobres transformandolos en fértiles y generando hábitat para miles de especies de plantas y animales.De esta maravillosa planta se obtiene un sin de beneficios: savia o chaguarmisqui, miel de agave, fibra o cabuya, alcaparras, instrumentos musicales, cerca viva, y aprox. media tonelada de biomasa.En los valles de Quito se encuetran muchas tierras poco fértiles y subutilizadas principalmente por falta de agua y regadío, obligando a los agricultores a emigrar al centro urbano lo cual es el nucleo de todos los problemas no solo de Quito, sino de todas las grandes ciudades.El proyecto Yumbo Ñan pretende recuperar esta tradición milenaria, creando un sitio se procesamiento de los derivados del Agave de Quito, cuyo cultivo recupera tanto ecositemas com identidad.
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