Las viviendas de Quito no están preparadas para desastres naturales o accidentes evitables.REsiliente alivia esta problemática de una manera eficaz y sostenible, usando la capacidad y conocimiento del sector privado. Nuestra propuesta busca crear una economía circular para reforzar la resiliencia estructural de Quito, conectando a propietarios de viviendas y otras edificaciones con profesionales técnicos y proveedores del medio de la construcción. Mediante REsiliente, propietarios podrán subir sus inquietudes sobre los riesgos estructurales de sus edificaciones. Ingenieros y arquitectos profesionales, proveedores de materiales, y su personal de mano de obra podrán contactar a los usuarios propietarios e inquilinos para analizar dichas construcciones y presentar soluciones para mitigar riesgos y solucionar problemas. Mediante REsiliente, más de 500,000 familias en Quito podrán asegurarse que la mayor inversión de su vida, su vivienda, esté segura y preparada.