Actualmente, la industria salmonera utiliza pigmentos artificiales para la coloración del salmón y como existe una tendencia mundial de utilizar pigmentos de origen natural, detectamos un nicho de mercado en esta industria, el cual hoy en día se encuentra limitado por altos costos de producción y escasa disponibilidad. Además, en la Región de Antofagasta y el país se producen al día cientos de desechos de crustáceos que van a parar a rellenos sanitarios, lo cual genera problemas de insalubridad afectando a la flora y fauna del ecosistema cercano. De esta forma detectamos dos problemas, el primero corresponde a la demanda insatisfecha de pigmentos naturales y el segundo, la contaminación con desechos de crustáceos, las cuales vamos a abordar en este proyecto. El producto busca suplir la demanda insatisfecha de los pigmentos naturales cuyo nicho de mercado está alza, además reutilizar desechos de artrópodos para así mitigar la contaminación que estos producen.